domingo, 19 de julio de 2009

El concierto de Benjamín Prado y Coque Malla

"Es necesaria la noche para ver las estrellas", y así, dándole la razón a los versos, mientras la noche caía sobre Madrid aparecían los protagonistas sobre el escenario.
Un espectáculo lo es por la calidad de lo que se expone sobre el escenario, pero también por las ganas y espíritu de los artistas, y hoy tanto Benjamín Prado como Coque Malla, sin olvidarnos de la guitarra de Nico Nieto, lo han dado todo en el centro cultural Galileo, en los veranos de la villa, en el ciclo Poesía en Concierto.

Benjamín Prado ha recitado, ha cantado ("Berlín" también sonó bien en tu voz), ha bailado, ha tocado la armónica, ha acompañado con la guitarra, ha bebido, ha regalado libros, los ha roto... se ha crecido sobre el escenario, que ha hecho suyo, y no ha defraudado.

El concierto ha tenido de todo. Ha comenzado como esperábamos, con el poema Caminos y la Canción Hasta el final (que ya adelantamos en el blog), y ha ido alternando y mezclando canciones con poemas. Mientras tanto sus protagonistas se cambiaban los papeles como quien cambia de guitarra. Benjamín Prado acompañaba a los coros, Nico Nieto recitaba (¿su propio poema?), Coque Malla recitó con la edición de la antología de Benjamín "Aquí y entonces", acompañó a la guitarra los poemas de Benjamín, cantó, y muy bien, canciones de su último disco "La hora de los gigantes".

Benjamín, se vino arriba y armónica en mano acompañó sus propios poemas, guitarra en ristre punteó las canciones de Coque Malla. Guiñó al público, al que lanzó Iceberg, Mi Antología, Marea Humana; un ejemplar de Aquí y ahora desapareció entre el público mientras otro, como los roqueros rompen su guitarra contra el escenario, fue despedazado página a página en plena catarsis del poeta. Recitó a capela, solo, sin nadie, bajo los focos, frente a su público: "Lo mismo y lo contrario", "Acertijo"...

Poema a poema, canción a canción, sorpresa tras sorpresa, durante una hora... y un poco más, el rato que les llevó a los artistas regresar al escenario ante la insistente petición del público (2 minutos de "otra, otra" unánime y palmeado...). Un bis en el que los cuatro, Benjamín, Coque, Nico y la botellita, regresaron al escenario para poner fin al espectáculo.

Si sirvo como botón de muestra, disfruté. Aplaudí (con cada canción), me reí ("en realidad soy bailarín", "Benjamín ya está en su jet privado"), acompañé con las palmas (al son de "Se te está cayendo el pantalón"), me emocioné (apoteósica la versión de números rojos), me enganché (Coque, con tu "Berlín" me has ganado para toda la vida), me sorprendí (jamás un poeta bailó tanto durante un recital), me sonrojé (¡¡ole por esa mención a este blog en el folleto de los ciclos de Poesía!!), y me quedé con ganas de más. Afortunadamente tenemos los libros, los discos... y los vídeos y audios que no dejaré de colgar durante los próximos post.

Aquí dejo "Caminos y hasta el final" ahora en vivo y en directo (las guitarras saturan el sonido, el audio del otro día se escucha bastante mejor).
Dejadme tiempo, y seguid enganchados, que iré colgándolo todo, fotos, vídeos (los siguientes se verán algo mejor) y audios.

Por cierto, y con este van 300 post...

12 comentarios:

Rubentxo dijo...

Vaya noche, a juzgar por lo que cuentas...
Oye, y enhorabuena por las 300 entradas de tu bitácora: ¡feliz cumpleposts!

Astaroth dijo...

Enhobuena, Meadow, porque si tu eres Meadow es porque en algún momento yo fuí Rain o al menos parte de tu hierba creció bajo mi lluvia o al menos con mi rocío. Me siento orgulloso de tí. Que cumplas muchos 300 con el mismo entusiasmo y que todos nosotros lo sigamos disfrutando y tambíen a Benjamín a través de tu admiración.

Fran dijo...

Simplemente Magico. Te robe unas fotos, espero no te moleste

http://diariodeogro.blogspot.com/

Ana A. dijo...

¡¡¡Fue brutal!!!

Me fui con el regalo de que me leyera uno de mis poemas favoritos (Lo mismo y lo contrario), con la púa de C.Maya, con una hoja arrancada a la poesía, con poesía, con emoción y con ganas de que se repita, no lo mismo que hay momentos irrepetibles, pero sí algo parecido a tanto arte.

Besos y felicidades por tu post300.

pd. con tu permiso me apropio de una foto para hacer una entrada :D ¿vale?

kawligas dijo...

Me recuerdas mucho al gran Fernando Garcín

Látigo Verde dijo...

Estuve allí, y fue estupendo.
Había leído en este blog cosas sobre abteriores espectáculos, pero desde luego, no hay nada como estar y sentirlo todo en directo.
Disfruté como una enana y el espectáculo estuvo lleno de sensibilidad y electricidad.
Gracias por el post para recordarlo.
Saludos,

Martha

P.D.: ¿Podría tomarte prestada una foto yo también?

Meadow dijo...

Pues claro!
Coged lo que queráis, para eso son, para eso es el blog, para compartir y divulgar.

Por cierto, me ha dicho Benjamín que van a repetir (aunque por ahora no en Madrid), ya iré dando más detalles cuando lo tenga confirmado.

Ana A. dijo...

¡¡¡¡ESPERO IMPACIENTE CONFIRMACIÓN!!!!

Besos y gracias por las fotos y demás!

Karmela dijo...

No pude estar allí pero estoy segura que la noche fue única...espero la siguiente....

Feliz cumple Meadow!!!!!

Anónimo dijo...

Fernando Garcín es el original esto es es la copia.

Anónimo dijo...

El poema que recitó Nico Nieto es de Coque Malla. El recital fue una pasada. Hay versos que se pueden tocar (con las manos o con la guitarra), canciones que se pueden masticar, música que se puede abrazar... Así lo sentí yo.
Enhorabuena por el blog, Meadow.

Anónimo dijo...

tuve la suerte de estar esa noche y q maravilla de espectaculo,kede rendida a los pies de estos pedazos de artistas,de verdad fue muy emocionante,ojala se vuelva a repetir!!!