martes, 25 de noviembre de 2008

La duda... de El viajero

Ese poema de varias caras, como lo definió Benjamín, ya tiene forma, y forma bien. Nos lo ha regalado, a todos los que le seguimos en su propia voz o en su eco (en su blog o en éste), inédito, pero también inacabado, con una duda.

Primero la duda (ánimo, echémosle una mano):
"Tengo la sensación de que le falta un verso, antes del último. ¿Qué se os ocurre? :-)Esto ha sido divertido."

Después el poema:

EL VIAJERO
Se viaja siempre contra tu país,
de ti mismo a un lugar donde ser otro
que ya no te recuerde,
ni quiera regresar.

Pero dónde hay un mundo más allá del pasado,
para escapar de ti.

El que se marcha aprende a olvidar los caminos.
Quien se queda, renuncia a la aventura de irse
y al sueño de volver.

Pero de qué le sirve la distancia
al hombre que no olvida,
el que está condenado a que su rostro
se pueda reflejar a la vez en dos ríos.

Con la tristeza del que se detiene
para dejar pasar de largo sus deseos;
con la esperanza intacta
del que aún
no sabe dónde va ni a quién espera,

me despedí de ti,
bajé a la calle,
puse el pie en una tierra en la que no existías.

Nunca he ido más lejos que al dejarte marchar.

7 comentarios:

ILSA dijo...

Para acabar por el principo, supongo que podría caber la idea de...


Jamás he sabido volver a tu punto de partida.

Sonia Betancort dijo...

Yo siento con este poema, que es hermoso, que en él se confunden dos caras. Creo que al principio la intención del poema buscaba hablar de la sensación personal de libertad que a veces insufla el viaje, eso se ve en la primera estrofa. Luego parece que se va transformando en una reflexión acerca del amor, donde lo particular de ese amor parece sugerirse con un deseo contenido de la libertad del otro, un dejar marchar que reconfirme y resignifique la cercanía, el encuentro (Tal vez esa podría ser la idea del penúltimo verso).
Y es que ya no se sabe quién se marcha, si el que narraba o el otro al que se deja marchar... Y esa leve contradicción es realmente hermosa, porque el que se marcha abandona, pero también el que se queda, en tanto que consiente que el otro se vaya. Finalmente, creo que este es un poema que acertadamente va y viene, como un viaje, de la huida propia a la ajena, del amor al desamor, de la ausencia a la presencia, del bolero al río heraclitano.

Anónimo dijo...

Hola, Sonia, me gusta todo lo que dices, y mira que "todo" es una palabra por lo general demasiado grande, más grande que lo que cabe en ella. Y la idea de que dejar a alguien irse también es abandonarlo es, justo, la que tenía en la cabeza desde el principio. Sí, con esa pieza podemos completar el poema.
Y lo de Ilsa, también podría estudiarse, con la idea tal vez de que el final de algo siempre es el punto de partida de otra cosa.

Sonia Betancort dijo...

Gracias, Benjamín, no sabes cuánto estoy aprendiendo de este poema-blog, de ti en la palabra. Además, hacía mucho tiempo que no conocía a alguien tan generoso.
Meadow tiene mis señas, cuando necesites algo de Buenos Aires, no dudes en escribirme.
Un beso

Anónimo dijo...

Bueno, Sonia, ya nos veremos en Buenos Aires, si estás por allí. Yo no sé cuándo voy, aunque creo que el 29 de abril. Estaré por ahí una semana, supongo, porque me proponen dar una lectura de poemas, presentar en la feria "Mala gente que camina", participar en un homenaje a Alberti y María Teresa León y también ir a una universidad en La Plata. Hoy estoy trabajando mucho en la novela, pero si tengo luego un rato, me paso por nuestro poema.

Sonia Betancort dijo...

Cuántas cosas para una semana! Yo supongo que estaré por aquí, todo depende de lo que la U Salamanca demande de mí! Me gusta imaginarte adentro de tu novela, y en el poema también, como si fueran dos fractales de un todo más grande que lo que la palabra "todo" contiene.

Anónimo dijo...

A ver qué os parece. Se me ocurre el verso que irá antes del antepenúltimo, pero se me ocurre de dos maneras, de modo que tenemos que elegir entre "donde la luz no sea el perjurio de la noche" o "donde la luz no sea un complot de la noche." Me apetece saber vuestra opinión. "Donde la luz no sea el perjurio de la noche / ni el aire la pared de lo invisible / (...)" "Donde la luz no sea un complot de la noche, / ni el aire la pared de lo invisible / ni(...)"